PRIMERO: Con frecuencia hay en la frente del burro y de la yegua un trozo de carne, llamado por los antiguos Hipómanes, el cual es de asombrosa utilidad para los problemas de amor.
Si puede obtenerse, lo haremos secar en un horno, tras haber sacado el pan, y lo llevaremos con nosotros siempre, tratando de que la persona que amamos lo toque. Esta persona sera nuestra.
También se puede hacer tragar el grueso de dos guisantes en algún licor, confitura o guisado, y el efecto sea idéntico.
Tendremos que trabajar en viernes, día de Venus.
SEGUNDO: Nos sacaremos unas gotitas de sangre con un alfiler, en un viernes y en primavera. La pondremos, en un pequeño puchero, en el horno para secarla, junto con las criadillas de un conejo y un hígado de paloma. Esta mezcla habrá de convertirse en polvo fino, el cual haremos tragar a la persona que amamos (poco mas o menos la cantidad de 5 gramos).
Si no surte efecto a la primera, repetirlo hasta tres veces, y el deseo se cumplirá.
TERCERO: Tendremos una sortija de oro cubierta por un pequeño diamante. No tendrá que haber sido llevada por nadie desde su fabricación.
Envolveremos dicha sortija en un trocito de seda, y la llevaremos así por el espacio de nueve de Ias y nueve noches; habrá de ser entre camisa y carne, por la parte del corazón.
El noveno dIa, antes de salir el sol, grabaremos con un punzón en el interior de la sortija la palabra “Scheva” (el punzón tiene que ser nuevo).
A continuación, conseguiremos tres pelos de la persona que amamos, y los ligaremos con tres nuestros, diciendo:
“!Oh, cuerpo!, pudieras tú amarme, y que tu designio acierte tan ardientemente como el mío, mediante la virtud eficaz de Scheva”.
Anudaremos los cabellos con cifras de amor, de tal manera que la sortija quede enlazada en el centro de las cifras.
Luego, dicha sortija serA envuelta en seda, y la llevaremos sobre el corazón otros seis días.
El séptimo dIa, se desenvolverA de las cifras de amor, y se hará llegar a la persona amada.
Haremos todo antes de salir el sol y en ayunas.
CUARTO: Otro recurso es de la hierba “enula campana”, “inola” o “elenio”. En la vigilia de San Juan, en junio, habrá de ser recogida, y antes de salir el sol. La haremos secar, y convirtiéndola en polvo, la mezclaremos con Ambar gris. Tendrá que llevarse este polvo sobre el corazón durante nueve días, al termino de los cuales, lo haremos tragar a la persona amada. trataremos de dársela en un postre..
QUINTO: Existe un secreto entre los sabios cabalistas llamado “manzana de amor”.
Un viernes, antes de salir el sol, iremos a un jardín frutal, y de un Arbol, cogeremos una manzana.
Con unas gotitas de nuestra sangre, escribiremos sobre un pequeño papel blanco nuestro nombre y apellidos, y en la siguiente linea, el nombre y apellidos de la persona amada. Tres cabellos suyos han de ligarse con tres de los nuestros. Con Estos, ataremos otro trozo de papel sobre el que solo se lea la palabra Scheva, también escrita con nuestra sangre, al anterior escrito.
Seguidamente, cortaremos la manzana por la mitad, sacaremos las pepitas y en su lugar pondremos los papeles atados con los cabellos, junto con dos estaquillas puntiagudas de ramas; volveremos a unir las dos mitades, y secaremos la manzana en el horno, para envolverla después en hojas de laurel.
Se pondrá bajo la cabecera de la cama de la persona amada, sin que ella se de cuenta.
SEXTO: Para que una mujer ame a un hombre cada dIa mAs, se necesita un tuétano de la pata izquierda de un toro, con el cual haremos una pomada mezclando con Ambar gris y polvos de ciprés. El hombre llevarA esta mezcla y la hará oler de vez en cuando a la mujer.
SEPTIMO: Para que la mujer no se disguste con un hombre que no estuviese lo suficientemente robusto o tenga buen desempeño en el acto de Venus.
compondremos un bálsamo de la ceniza de estelión, de aceite de corazoncito y de algalia. Untaremos con el, el dedo grande del pie izquierdo y los lomos, una hora antes de hacer el amor.